A las 17 horas, nuestro párroco bendijo la Cruz que la Asociación de Mujeres Guadalupe, elabora en el patio que da acceso a su sede. Espacio cedido por el Ayuntamiento de Los Realejos, y que ellas con tanto esmero y generosidad, han ido dándole vida y sentido.
A su término y con las socias allí presentes, tuvieron oportunidad de merendar conjuntamente, para festejar la amistad, la fe, la convivencia y la fraternidad.
Valores importantes que no sabemos descuidar en estos tiempos tan recios para el compromiso y las relaciones inter-personales.
Desde aquí el agradecimiento al equipo de Mujeres de nuestro barrio Toscal-Longuera y felicitarlas por engalanar un año más su Cruz.
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