Vicente diácono y mártir:
El Señor a quien serviste en esta vida
te exaltó hasta la gloria plena
como vencedor en el combate
Verdaderamente pasaste por la gran tribulación
y lavaste tus vestidos volviéndolos blancos
en la sangre del Cordero.
Tu solicitud por los pobres,
su generoso servicio a la Iglesia
en el importante sector de la asistencia y de la caridad,
Concédenos vivir el martirio no a la manera que te vino
Sino el martirio dar también testimonio en la vida,
con las palabras, con las obras,
de Jesucristo presentándose en medio de este mundo
sin dejarnos vaciar de los contenidos fundamentales
que la fe en nuestro Señor nos da
Que sepamos vivir la prueba suprema del martirio
y el heroico testimonio de la sangre entregada por Cristo
Concédenos descubrir en nuestra vida
la misión de anunciar el Evangelio
abarcando a toda la vida social y pública de nuestro tiempo.
Que el Evangelio que anunciemos
produzca un cambio de conducta en nuestras vidas:
el amor de Dios transformará el mundo.
Amén.
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