Este fin de semana de julio se hubiera realizado la conocida como “entrada triunfal de la Virgen de las Nieves” en el centro de la capital palmera. La emergencia sanitaria había supuesto hace unos meses que el propio obispo nivariense comunicara el 22 de abril que “se suspende la celebración, en los meses previstos del presente año 2020, de la LXIX Bajada de la Virgen de las Nieves”.
El jueves el prelado nivariense era entrevistado en COPE La Palma. Era un día singular, dentro de lo que sería la Semana Grande de la lustral Bajada: «Los Enanos son deslumbrantes»- sostuvo.
El obispo compartió con los oyentes cómo vivía estas jornadas. “Aunqe no podemos manifestar públicamente toda esta emoción y devoción, lo llevamos en el corazón, y es bueno recordarlo”. Aun así quiso enfatizar que «la Intención del corazón es lo más importante de todo». “Traes a la memoria los momentos vividos otras Bajada y se te conmueve el corazón. Vamos a tener esperanza  y que pronto podamos realizar la Bajada de la Virgen como Dios quiere y como nosotros deseamos- subrayó.
Álvarez recordó algunos actos especialmente significativos de esta singular fiesta. “Yo disfruto y me emociono con todo de una manera extraordinaria”- dijo. Igualmente agradecía el esfuerzo y el trabajo de todas las personas e instituciones que con cariño estaban poniendo “lo mejor de sus capacidades para honrar a la Virgen de las Nieves”. Todo ello consideró que no era un esfuerzo vano y que la imagen de la patrona volvería a la capital.” Dios lo reconoce y la Virgen también. Dios conoce el corazón de las personas y Él nos recompensa»- aseveró.
Puso en valor, en otro momento de sus declaraciones, la devoción y el amor de los palmeros por su patrona, la cual se ha manifestado de muchas maneras a lo largo de la historia como habia subrayado en la misiva que escribió para esta edición de la Bajada de la Virgen: “A lo largo de los siglos, miles y miles de fieles cristianos han peregrinado hasta el Santuario de las Nieves para honrar a la Madre de Dios, presentarle sus necesidades, cumplir las promesas realizadas, darles gracias por los favores recibidos y hacerle ofrenda”. Por ello, una vez más “queremos celebrar a la Virgen María como signo e instrumento de la ternura de Dios para la humanidad. Ella es una mujer viva, de hoy, que tiene mucho que ver con nuestra vida presente” – exponía en su misiva.
Con un “ánimo a todos, que esto pasa”, quiso terminar el Obispo su intervención en la COPE,  recordando previamente la Misa que celebraría en la parroquia de El Salvador por las víctimas de la COVID-19.
ORIGEN
Hace casi 350 años, en 1676, el entonces obispo de Canarias, Bartolomé García Jiménez, comprobando la devoción de La Palma por la Virgen de las Nieves “juzgó por conveniente que dicha Santa Imagen de Nuestra Señora de las Nieves se traiga a esta ciudad, a la Iglesia Parroquial, cada cinco años”, y dispuso “que se comenzase el quinquenio el año de 1680 y de allí en adelante…”. Este compromiso lustral se ha celebrado ininterrumpidamente desde entonces hasta hoy (68 veces hasta 2015). Además, en algunas ocasiones la imagen de la patrona palmera ha sido trasladada a la capital en rogativas y celebraciones extraordinarias