"Aspirad a las cosas de arriba, no a las de la tierra" .
(Colosenses 3, 2).
Acción Pastoral "Parroquias con Corazón".
Para la celebración válida de la Eucaristía es absolutamente imprescindible la presencia de un sacerdote válidamente ordenado (C. 900); para la celebración lícita ha de ser un sacerdote ni impedido por ley canónica.
Para garantizar que es un verdadero sacerdote quien pide celebrar en una iglesia, debe presentar una carta comendaticia de su ordinario o superior, dada al menos en el año (C. 903).
Además se pide al sacerdote que se prepare debidamente con la oración antes de celebrar y que dé gracias a Dios al terminar, que respete y observe las normas establecidas tanto en el derecho común como en el as normas litúrgicas sobre ritos y ceremonias, tiempo y lugar, reiteración de celebraciones, participación, concelebración...(cc. 902-909).
No hay comentarios:
Publicar un comentario