La entidad recibió en el año 2022 un total de 390.000 euros de la asignación tributaria gracias a la solidaridad de los contribuyentes, que permitieron atender a más de 1.300 personas en situación de vulnerabilidad

 

Cáritas Diocesana de Tenerife recibió el pasado año un total de 390.000 euros de la asignación tributaria del IRPF, fondos que sirvieron para financiar seis proyectos y que permitieron atender y acompañar a más de 1.300 personas en situación de vulnerabilidad.

En concreto, la entidad percibió 61.922 euros para la atención a familias en situación de vulnerabilidad social; 160.000 euros para los dos centros de estancia diurna para personas mayores, proyectos “Hassidim y “Las Nieves”; otros 140.000 euros para la atención e integración de personas migrantes; y 28.636 para formación del voluntariado.


Desde 2017, los fondos asignados por los contribuyentes a través de la casilla de Actividades de Interés Social, conocida como la ‘X Solidaria’, se distribuyen a las organizaciones del Tercer Sector a través de una convocatoria pública de subvenciones en un sistema de doble tramo -y que las ONG destinan íntegramente a proyectos no a sus estructuras-. Las Comunidades Autónomas se encargan de asignar el 80% de esos recursos, mientras que al Estado le corresponde el reparto del 20% restante.

La solidaridad de los contribuyentes españoles a través de las casillas de la asignación tributaria permite a Cáritas poner en marcha cada año cientos de proyectos sociales, ya que, como entidad del tercer sector de acción social, obtiene fondos a través de la casilla de “otros fines sociales” y también de la casilla destinada a la Iglesia católica, al ser la confederación oficial de las entidades de acción caritativa y social de la Iglesia en España.

De esta manera, el contribuyente puede multiplicar su solidaridad al aportar el 1,4% de sus impuestos tanto al sostenimiento de la Iglesia como a los fines sociales. Este sencillo gesto no supone pagar más ni que se le vaya a devolver menos en el resultado de su declaración”.

La pasada primavera, el 53% de las personas contribuyentes marcaron la casilla solidaria de la renta, superando los 11,7 millones de personas. Sin embargo, todavía hay un 47% que no lo hacen, o bien porque marcan solamente la casilla de la Iglesia católica o porque no marcan ninguna. Dejar en blanco estas casillas de la asignación tributaria supone que una parte importante de la recaudación del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) pase cada año directamente a las arcas del Estado, en lugar de destinarse a fines sociales o al sostenimiento de la Iglesia.

Con motivo del inicio de la campaña de la Renta 2023 y con el objetivo de poder seguir impulsando una sociedad más justa, inclusiva e igualitaria, Cáritas ha lanzado la iniciativa “No cuesta nada ayudar X dos” para invitar a la sociedad a marcar las dos casillas.