El lunes 18 de mayo, hace una semana que la Comunidad Parroquial de Ntra. Sra. de Guadalupe, en Toscal-Longuera, Los Realejos, reabrió las puertas de su Templo Parroquial.
Nuestro párroco agradece desde aquí, tal y como lo ha realizado en otras ocasiones, en las diferentes celebraciones de las Eucaristías de estos días, la generosidad, la valentía, la corresponsabilidad y la confianza en Dios depositada por los agentes de pastoral y por parte de la feligresía que van respondiendo a la convocatorias de las Eucaristías, no virtualmente y calentitos en casa, sino REALMENTE EN EL TEMPLO PARROQUIAL Y EN COMUNIDAD.
Nuestro párroco agradece desde aquí, tal y como lo ha realizado en otras ocasiones, en las diferentes celebraciones de las Eucaristías de estos días, la generosidad, la valentía, la corresponsabilidad y la confianza en Dios depositada por los agentes de pastoral y por parte de la feligresía que van respondiendo a la convocatorias de las Eucaristías, no virtualmente y calentitos en casa, sino REALMENTE EN EL TEMPLO PARROQUIAL Y EN COMUNIDAD.
Agradece de igual modo, el comportamiento y la colaboración de quienes vienen a la EUCARISTÍA Y LLEVAN a la práctica las Medidas Parroquiales presentadas en el Consejo de Pastoral telemático del mes de Abril 2020. Y gracias a quienes van respondiendo de manera fiel y diaria a la VISITA DIURNA CON EL SANTÍSIMO SACRAMENTO de 10 a 13 horas. Una clara apuesta por potenciar la edificación de la vida cristiana en la verdadera roca que es CRISTO. Cuando no hay vida de oración, Cristo no está y la Comunidad tampoco.
¡TODO LO PUEDO EN AQUEL QUE ME CONFORTA. ÁNIMO Y ADELANTE!.
¡NO TENGÁIS MIEDO, ABRIR DE PAR EN PAR LAS PUERTAS A CRISTO!.
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