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miércoles, 14 de agosto de 2019

IV Lugares entrañables y generosos en la devoción a Ntra. Sra. de El Socorro en Güímar- Tenerifeº


Ermita Ntra. Sra. de El Socorro en Güímar- Tenerife. Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento.



La edificación que alberga la imagen de Ntra. Sra. de El Socorro, durante los días de la Bajada, en el Caserío del mismo nombre, fue construida en 1510. Reedificada hacia 1595. 
Posteriormente sufrirá una restauración en el año 1662. Y no será la única porque a esa le seguirán las de los años 1977, 1990 y 1998. 
Se reconstruye en 1814 y se amplía hacia el frente en el período de 1838- 38. 
Reformada en 1842 y ampliada con nueva nave en 1854- 1894. 
Declarada Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento por el Gobierno de Canarias.  Orden de 2 de julio de 1993, de publicidad del Acuerdo de Gobierno de Canarias de 19 de noviembre de 1990.







La Ermita de El Socorro,  alberga en su interior, un retablo de gran importancia que  debido a unas obras en la misma, fue eliminado y sufrió un lamentable abandono. 

Su recuperación da comienzo en el año 2007 siendo cura- párroco de San Pedro Apóstol de Güímar, Rubén Facundo, quien inicia unas gestiones junto a un grupo de vecinos amigos del patrimonio, para su restauración en el año 2008. 




 El equipo de restauración y conservación Elisa Campos Domínguez realizó, el trabajo con financiación de la Mayordomía de la Virgen del Socorro (un 50%), por el Polígono Industrial Valle de Güímar (un 25%) y la Fundación Caja Siete-Pedro Modesto Campos (un 25%).


Este retablo se hizo para la Virgen de Candelaria.  Estuvo en la antigua basílica la Virgen de Candelaria hasta que fue trasladado por D. Domingo Pérez Cáceres, obispo de Tenerife y natural de Güímar,  a la ermita de El Socorro. 






Data del siglo XIX, concretamente de 1870. Es de estilo neoclásico, lo que se aparta del estilo imperante en las Islas, el barroco.  En la parte central se encuentra una imagen del Resucitado, , tallada en madera de cedro y policromada, es obra del artista ecuatoriano Ricardo Villalba Sevilla. Llegó a Tenerife en el año 2008 y se trata de una copia aproximada del Cristo Resucitado de Sevilla, como se puede apreciar en la fotografía, y al cual los sevillanos le guardan una extraordinaria devoción.



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